De tanto amor te odié

Escritos con un "Te odio", esparcidos,

hallé mil folios por toda la habitación.

Un óleo desgarrado a tiras por un cuchillo,

inerte, sin vida, por el centro del salón,

se trata sí de aquel cuadro tuyo favorito,

de aquel hermoso bodegón que te pinté.

Tu cuerpo inerte en el suelo frío, ausente

con lágrimas en los ojos de odio, amor y rencor.
Tu frente marchita y tu mirada ausente
y tus manos no dejaban de escribir
como si de una mecánica impulsiva se tratara,
un "Te odio" tras otro, en otro folio habría de salir.

Amor de cristal roto, machacado, malherido,
mal usado y mal vivido, despreciado,
sobre dosificado y desgarrado por el uso
y envenenado por exceso de pasión.
Acuchillado por los celos y el tormento,
consumado en corto tiempo hasta agotarlo,
maltratado, muerto y como dice la canción
desgastado ya de tanto usarlo solo se murió.

Beberse la vida a sorbos, despacio, sin agobios,
o morir de un atracón... esta será la cuestión.

Autor.- José L. Pérez.